domingo, 30 de noviembre de 2008

Red de mentiras. Sobre socios y confianza.


Red de mentiras (Body of lies,2003), es el último film de Ridley Scott, un director que por meritos propios forma parte de la historia del cine ( Blade Runner, Alien), y que realiza películas que rara vez causan indeferencia generando criticas muy extremas a favor y en contra. Personalmente, me gustan mucho Gladiator, y sus dos últimos films (El reino de los cielos y American Gangster).

Red de mentiras es un thriller que, al hilo de una operación de búsqueda de una célula terrorista que esta atentando en Occidente, nos muestra la relación entre el Jefe de la inteligencia norteamericana en Oriente Medio, Ed Hoffman (Russell Crowe) y su agente de campo Roger Ferris (excepcional Leonardo Di Caprio) y las particulares visiones de ambos sobre el conflicto.

La película plantea numerosas e interesantes preguntas sobre la situación actual en Oriente Medio: la dificultad de luchar contra un enemigo que no utiliza tecnología, la desconfianza entre aliados de diferentes culturas y con distintos intereses, las divergencias de opinión y estrategia entre quienes dirigen las operaciones desde un despacho en Washington y quienes desarrollan las operaciones de campo en Irak, la posibilidad de crear realidades virtuales con la tecnología hasta el punto de hacer aparecer a un pacifico arquitecto como un terrorista fundamentalista, etc..

No obstante, hay dos elementos importantes que me gustaría señalar por su conexión con el mundo empresarial:

1) No pueden existir socios, ni equipos de trabajo que no compartan un mismo objetivo y desarrollen su estrategia de común acuerdo. Los socios han de tener una visión común, un fin común, en el film Hoffman y Ferris comparten el objetivo de localizar a la célula terrorista, pero lejos de aunar esfuerzos para conseguirlo, debatiendo para mejorar la estrategia, se dedican a realizar cada uno acciones independientes no concertadas con el otro. Esta característica es asimismo visible en su relación con el jefe de la inteligencia jordana, en teoría un aliado, pero con quien también se mantiene una relación de desconfianza y una ausencia de objetivos comunes.

2) La necesidad de transparencia en las organizaciones. Ferris llega a desconfiar de su jefe, y finalmente abandona su trabajo, porque el líder de su equipo no es sincero con el respecto a sus planes, ni admite las ideas de su subordinado. La necesidad de ser transparentes, de generar un ambiente de confianza, donde los responsables de las empresas puedan recibir criticas constructivas de su equipo debería ser una constante que guiase la dirección empresarial sino se quiere perder la cohesión del grupo o incluso a alguno de sus miembros.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Hola, soy Alvaro y ¿porqué no entrás en: www.santiysublog.blogspot.com
Entra y hazte seguidor, te gustará.
Un saludo,
Alvaro Luceño.